miércoles, 12 de febrero de 2014

La figa o mano del poder


La higa o figa es una figura en forma de mano, generalmente con el puño cerrado y saliendo la punta del dedo pulgar entre el dedo índice y el cordial. Aunque puede haber otras formas la función es la misma. 

Esta figura se usaba como protección desde tiempos remotos, especialmente los pobladores de Portugal y Galicia, en donde las meigas, como le llaman a los ocultistas, eran el azote de los campesinos, sobre todo cuando sacaban sus cosechas o robaban a los niños pequeños. Para estar seguros que las meigas no les harían daño y tampoco les causarían mal de ojo, usaron esta figura que mágicamente significa una seña de rechazo y burla para el mal. 

Su origen

Se dice que el origen de esta protección fue cuando a un sacerdote que viajaba por los viejos caminos de lo que actualmente es la frontera entre España y Portugal, le salió al paso un demonio y le ofreció todo el dinero del mundo, la felicidad, mujeres y placeres.

Ante la presencia y tales tentaciones el anciano cura trató de sacar de su bolsillo el crucifijo del que nunca se separaba, pero el demonio se convirtió en una serpiente y su cuerpo impidió que la mano del viejo llegara hasta el bolsillo. 

El pobre ya sin fuerza cayó sobre la tierra del camino, y dijo al diablo que aceptaba todo lo que pidiera a cambio de que lo dejara ir sin hacerle daño, aunque con la secreta intención de ganar tiempo hasta que se le ocurriera algo para liberarse del maligno.

Cuando el demonio lo soltó para obligarlo a firmar el pacto, el sacerdote hizo la señal de la figa, fingiendo un calambre del cual no se podía liberar. El viejo cura notó que el demonio se enojó, pero al mismo tiempo escuchó cantar a un gallo, señal de que el Sol estaba a punto de salir y sabiendo que era el momento ideal, con la otra mano logró alcanzar el crucifijo.

Con eso dio tiempo para que Satanás se alejara un poco y sintiera la fuerza de la cruz, pero sin que pudiera verla y pensando que la señal que el cura hacía era un signo poderoso, lo dejó en paz. Desde entonces la figa ha sido usada como amuleto de protección contra todo daño de seres malignos que por una u otra razón te adversa en la vida.


Características que debe tener

La figa debe ser tallada en azabache o coral negro para que funcione como protección excelente. Debe ser pequeña para poder llevarla colgada al cuello y así cubrirla con la ropa para que, en caso de ser víctima de un ataque de mala energía, puedas echar mano de ella y de esta manera protegerse.
Funciona también como protección para los niños y evitar que sean víctimas del mal de ojo, hay que colgar al cuello esta figura, preferentemente de coral. Hay que consagrarla para uso personal. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario